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El enfoque de nuestro Grupo hacia la neutralidad de carbono comienza por reducir las emisiones a lo largo de toda la cadena de valor de Lavazza, desde el cultivo del café hasta el final de la vida útil del producto, pasando por todas las etapas intermedias. Dado que somos conscientes de que todas las emisiones no pueden reducirse por completo, Lavazza ha iniciado un programa de compensación de las emisiones de carbono residuales, para aquellas que no han podido reducirse. En 2020 iniciamos nuestro camino mediante la compensación de las emisiones directas para lograr la neutralidad total de las emisiones de las oficinas y plantas de producción del Grupo. El objetivo final es lograr la neutralidad total de carbono compensando todas las emisiones indirectas, es decir, todas las emisiones generadas a lo largo de toda la cadena de valor, desde el cultivo del café verde, el envasado, la distribución del producto final, el uso y la eliminación de los productos.

A nivel del producto, las nuevas cápsulas de aluminio Lavazza compatibles con las máquinas Nespresso Original* son uno de los primeros productos Lavazza neutros en CO₂: esto significa que compensamos todas nuestras emisiones anuales de carbono en comparación con los volúmenes producidos y comercializados.

*Nota: Lavazzano se encuentra afiliada, avalada ni patrocinada por Nespresso

Dado que el cambio climático es un problema mundial, el impacto de una tonelada de carbono emitida en algún lugar del mundo puede neutralizarse reduciendo o capturando una tonelada de carbono en otro lugar: este es el principio de la compensación de carbono (también denominada compensación de CO₂).

Esta reducción (o secuestro) de carbono se consigue a través de proyectos específicos de carbono, muy a menudo ubicados en países en desarrollo.

Estos proyectos generan créditos de carbono, en los que 1 crédito equivale a 1 tonelada de emisión de CO₂ reducida o secuestrada. El ahorro de carbono se realiza utilizando metodologías reconocidas internacionalmente y se controla con regularidad.

Además de la reducción o secuestro de carbono, algunos de estos proyectos también proporcionan otros beneficios ambientales, sociales y económicos, como la preservación de la biodiversidad, el empleo, el aumento del salario diario, el apoyo educativo y sanitario. Apoyar estos proyectos es una forma de mejorar los medios de subsistencia de las comunidades locales de forma sostenible y de hacer frente al cambio climático para contribuir así a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.

*Lavazza no se encuentra afiliada, avalada ni patrocinada por Nespresso.

Con el lanzamiento de las cápsulas de aluminio, Lavazza ofrece todas sus marcas más famosas (Qualità Oro, Qualità Rossa, ¡Tierra!, Crema e Gusto y Dek), al tiempo que declara que esta gama de productos es neutra en carbono.

Este camino es coherente con el compromiso de Lavazza Group de adherirse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, en particular respondiendo a las metas del ODS 12 (Objetivos de Desarrollo Sostenible: producción y consumo responsables) y del ODS 13 (lucha contra el cambio climático).

En concreto, los proyectos de compensación tienen como objetivo la reducción de las emisiones de CO₂. Cada tonelada de CO₂ reducida o secuestrada genera 1 crédito de carbono. Las reducciones efectivas de las emisiones (o confiscaciones) se miden con precisión mediante metodologías de cálculo rigurosas y son verificadas por terceros. Tras este proceso de verificación, los créditos de carbono se publican en el mercado y se ponen a disposición en un registro electrónico internacional de carbono. B28 Todas las operaciones quedan así localizadas y a disposición del público. Una vez utilizados a efectos de compensación, los créditos se retiran para evitar que se computen dos veces. El proyecto Bosque Amazónico Madre de Dios apoyado por Lavazza está certificado por normas reconocidas internacionalmente (VCS y CCB) para garantizar una alta calidad y solidez del proyecto. Además, nuestro socio climático Ecoact, que participa en este proyecto, garantiza el cumplimiento de las mejores prácticas de compensación, desde la selección del proyecto hasta la retirada de los créditos en nombre de Lavazza.

La neutralidad de estas cápsulas incluye la compensación de emisiones producidas a lo largo del ciclo de vida del producto, desde el cultivo del café hasta el final de su vida útil, pasando por todas las etapas de producción, transporte y eliminación.

Esto incluye la recolección de materias primas, la fabricación del producto, la fase de envasado, el transporte del proveedor al distribuidor y del distribuidor al consumidor y, por último, la fase de eliminación.

Nuestro enfoque hacia la neutralidad de carbono es un acto puramente voluntario. Este camino es coherente con el compromiso de Lavazza Group de adherirse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, en particular respondiendo a las metas del ODS 12 (Objetivos de Desarrollo Sostenible: producción y consumo responsables) y del ODS 13 (lucha contra el cambio climático).

Desde hace 125 años, el enfoque empresarial de Lavazza se basa en la sinergia entre el sistema de valores y la solidez económica, demostrada por el gran compromiso con la sostenibilidad. Con el tiempo, esta sinergia se convirtió en una vía estratégica de innovación de productos y procesos, y de reducción del impacto con vistas a una integración cada vez mayor de la sostenibilidad, en coherencia con el compromiso de Lavazza Group de adherirse a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, en particular con el ODS 12 (producción y consumo responsables) y el ODS 13 (lucha contra el cambio climático).

Recientemente hemos decidido acelerar este camino debido al empeoramiento de la emergencia climática que nos afecta a todos, incluidas las empresas: los últimos estudios muestran cómo este fenómeno podría llegar a ser irreversible. También hay que tener en cuenta que el café es un producto agrícola que crece en algunas de las zonas del planeta con mayor riesgo de sufrir los efectos del cambio climático, lo que crea desequilibrios con consecuencias importantes y directas para los productores de café y sus familias, así como sobre la producción, la productividad y la calidad del café.

La mayoría de los proyectos de compensación que existen en la actualidad se encuentran en países en desarrollo. Los beneficios sociales vinculados a estos proyectos tienen un impacto positivo notable en las comunidades locales situadas donde se implementa el proyecto.

Todos los proyectos de compensación tienen como objetivo la reducción de las emisiones de CO₂. Cada tonelada de CO₂ reducida o secuestrada genera 1 crédito de carbono. Las reducciones efectivas de las emisiones (o confiscaciones) se miden con precisión mediante metodologías de cálculo rigurosas y son verificadas por terceros reconocidos por la ONU. Tras este proceso de verificación, los créditos de carbono se publican en el mercado y se ponen a disposición en un registro electrónico internacional de carbono. Todas las operaciones de compensación quedan así localizadas y a disposición del público. Una vez utilizados a efectos de compensación, los créditos se retiran para evitar que se computen dos veces. El proyecto Bosque Amazónico Madre de Dios apoyado por Lavazza está certificado por normas reconocidas internacionalmente (VCS y CCB) para garantizar una alta calidad y solidez del proyecto. Además, nuestro socio climático Ecoact, que participa en este proyecto, garantiza el cumplimiento de las mejores prácticas de compensación, desde la selección del proyecto hasta la retirada de los créditos en nombre de Lavazza.

Se trata del primer producto de la empresa neutro en CO₂. La neutralidad de carbono del producto incluye toda la cadena de suministro y el ciclo de vida del producto, desde el cultivo del café hasta el final de su vida útil, pasando por todas las fases de producción, transporte y eliminación.

Se trata del primer hito que pretende reducir y compensar las emisiones indirectas a lo largo de toda la cadena de suministro, desde las operaciones del proveedor al distribuidor y del distribuidor al consumidor, bajo el control directo de Lavazza.

Además, para las emisiones directas, Lavazza ha reducido y compensado sus emisiones a nivel corporativo (plantas de producción, oficinas comerciales, oficinas) desde 2020. La neutralización de las emisiones indirectas tendrá lugar de forma gradual y se logrará mediante cuotas anuales progresivas representadas por productos y marcas.