El sorbete de café es una de las variantes más queridas del famoso y entrañable postre italiano, el clásico sorbete.
Este postre frío se considera el ancestro del helado de fruta.
Fresco y delicioso, es el postre perfecto para cualquier ocasión.
Sus orígenes se remontan a la antigüedad cuando el emperador Nerón trajo hielo de los montes Apeninos a Roma. En Sicilia, los árabes aprendieron a usar la nieve del Etna mezclada con sal marina para mantener baja la temperatura del sorbete durante su procesamiento.
La invención del sorbete se remonta a un pescador de Aci Trezza, en Sicilia, que creó el prototipo de una heladería con la mezcla de sal marina y nieve.
Para preparar este delicioso postre, sugerimos usar Delizioso. Un inconfundible espresso hecho de granos de Arábica de Brasil, Asia, América Central y América del Sur con notas aromáticas suaves y dulces.