Se dice que la primera marca de café es originaria de Estambul en 1554 y se le dio un nombre que significaba "Escuelas de gente culta", que representa el lugar en el que los consumidores podían reunirse y dedicarse a la filosofía, la música, las artes y el ajedrez.
Hoy, se consume en la mayoría de los países del Medio Oriente y en varias áreas de la península balcánica. Además de esto, también tiene su propia sección en el Museo de Arte Turco e Islámico, una verdadera joya de Estambul, donde se conservan algunos de los vestigios más preciados del pasado del país.